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Benten Biotech: "El éxito está en contar con una visión integral del negocio"

La conjunción de disciplinas complementarias, las trayectorias empresariales y académicas de sus fundadores y la capacidad de leer correctamente las necesidades del mercado, hicieron que la empresa de biotecnología Benten Biotech SRL se iniciara como start up incubada en Khem en 2016 y ya se encuentre consolidando destinos tan variados como Rumania, Jordania, Brasil, Chile, Colombia, Paraguay y México.

Benten Biotech SRL fue una de las empresas que obtuvo en diciembre el reconocimiento al esfuerzo exportador de servicios organizado por la Unión de Exportadores del Uruguay (UEU) y el Banco República.

Sus fundadores Dr. Jorge Wenzel, bioquímico con experiencia en microbiología industrial, y DMV Esteban Guerra, veterinario con mas de 15 años de experiencia en asesoramiento a la industria de bilógicos veterinarios, detectaron que el mercado de la biotecnología a nivel global estaba cambiando, se estaba abriendo y que la tendencia era el outsourcing o tercerización de la investigación y desarrollo de soluciones para las empresas productoras de biólogos veterinarios.

La presentación del proyecto en la ANII y la posibilidad de insertarse en la incubadora Khem -donde funciona actualmente la empresa- fue el impulso que hizo realidad el proyecto. El Dr. Wenzel, investigador categorizado en el Sistema Nacional de Investigadores, tiene experiencia en  investigación académica y trabajó 10 años  en el Instituto Clemente Estable. En tanto, Guerra, Doctor en Medicina Veterinaria, venía acumulando una amplia experiencia en asesoramiento de empresas en Uruguay, Argentina, Turquía y Brasil en el desarrollo e implementación a escala completa de procesos para la industria de vacunas veterinarias.

La clave del éxito del proyecto, según indicaron los empresarios reunidos con la UEU, fue la de contar con una visión integral del negocio: desde cómo se desarrolla el producto, cuáles son las soluciones que buscan las empresas, cómo se inserta en el mercado y todo lo que lo rodea.

Explicaron que la biotecnología se trata de una serie de actividades de alto valor agregado, alta inversión, alto riesgo y altísima rentabilidad. “Básicamente nuestro producto es conocimiento, neuronas”, dijo Guerra, lo que significa la contratación de personal altamente calificado (master o doctorado). “Para competir en el exterior es importante tener una fuerte propuesta de valor y encontrar el nicho de mercado que uno conoce bien, eso ha permitido tener una respuesta muy favorable de los clientes”, explicó Guerra.

Consultados sobre el nivel de competencia en el mundo, los empresarios indicaron que exportan principalmente a países en desarrollo, que es donde cuentan con redes de contactos, y allí compiten básicamente con universidades y centros de investigación. Dichas instituciones manejan otros tiempos y en ese sentido Benten cuenta con la ventaja de poder moverse de forma más ágil. Afirmaron que el negocio está en entrar y salir rápido, ser eficientes en la formulación y ejecución de los proyectos.

Entre los desafíos hacia adelante los empresarios entienden que se necesita a nivel gubernamental el diseño de herramientas para acompañar las empresas de biotecnología en sus primeros años, facilitando el proceso de consolidación.  Ejemplos de las necesidades específicas son mejorar el acceso al crédito para pymes jovenes y la creación de un fondo de garantías para respaldar negocios en el exterior. Solucionando esos cuellos de botella el sector tendría grandes posibilidades de despegar como lo está haciendo en buena parte del mundo.